¿Y dónde están los demás?
Cuando Carmen Pérez pregunta ¿En dónde están los obreros, las amas de casa, el #YoSoy132, los politécnicos, la UNAM, los demás estudiantes? ¿En dónde los cantantes que están con el pueblo? ¿En dónde los empleados y dónde los pobres? Yo, ciudadano común y corriente veo que esta compañera está poniendo los puntos sobre las íes. ¿Sólo los maestros y los de Morena no están ciegos? Y concluye: ¿Dónde están los demás? Con ella, me pregunto ¿Qué hacer con tanta verdad?
Jesús Sosa Castro / A los Cuatro Vientos
Voy a dar mi opinión. El Movimiento Regeneración Nacional es una organización que está naciendo en medio de una serie de luchas y contradicciones políticas y sociales. La ruta en la que va, ubica a este movimiento como la fuerza más activa pero la más compleja. También la más ligada a las necesidades del pueblo. Por supuesto, tiene errores y limitaciones en el trabajo de dirección. Pero en el espectro de fuerzas que existen en México, Morena es hoy, la única que puede encabezar una revolución que transforme de raíz la situación complicada que vive el país. ¡Este es mi punto de vista!
A raíz de la aprobación de la reforma energética y los hechos sucedidos en el Senado, en la Cámara de Diputados, en los Congresos locales y en el DF por el aumento al pasaje del Metro y la criminalización de la protesta pública; sólo Morena, un sector de jóvenes y algunos intelectuales, tuvieron la capacidad de reaccionar ante las políticas entreguistas de Peña Nieto y la conducta demencialmente policíaca de Miguel Ángel Mancera. El PT y algunos diputados del MC, asumieron un compromiso digno en las acciones a favor de Pemex. El PRD quiso lavarse la cara de sus propias vergüenzas y salió más desprestigiado que como estaba
La ausencia de AMLO y el apresuramiento golpista del PRIAN para sacar cuanto antes sus reformas, pusieron a flotar las fallas en la conducción y trabajo de Morena. Algunos de estos equívocos tienen que ver con la falta de convocatoria de los dirigentes intermedios, con la inexistencia de una dirección colectiva, con la flaqueza de los liderazgos del Comité Ejecutivo Nacional, con la indefinición absurda de éste hacia las políticas regresivas y represoras de Mancera y con la falta de una dirección, precisa y maciza, sobre lo que había que hacer en los cercos. Todos hicimos lo que pudimos, pero dirección política, no la hubo
Sé que los líderes no nacen en maceta. Son resultado de una experiencia que se forja en la lucha, en el contacto permanente con la gente y sobre todo, en el trabajo cotidiano, con iniciativa y conocimiento de los problemas. Morena y sus líderes son una gama de expresiones y de orígenes políticos distintos. Tanto la organización como su dirigencia, son resultado de una plural realidad que vive el país y su gente. Ambos, son obra del pueblo, de sus contradicciones y de su composición social. No obstante, Morena no puede sentirse satisfecha con los resultados alcanzados. Sin embargo, estas deficiencias poco tienen que ver con la parte moral y operativa de su trabajo. Creo que es su composición social lo que hace difícil tener una línea política en la que converjan todas las corrientes de pensamiento que se encuentran en su seno. El Movimiento Regeneración Nacional es una fuerza pluriclasista que actúa y coexiste porque considera que Morena es el motor que puede impulsar los cambios políticos, sociales y culturales que demanda la nación. Es, para decirlo con claridad, una organización en la que caben todos, desde obreros hasta empresarios. El punto que nos une, es la lucha por la transformación del país, la honestidad, la administración transparente de los asuntos públicos, la lucha contra la corrupción, el sentido nacional y el patriotismo
Morena no es un Partido obrero ni AMLO es un líder socialista. El partido Nuevo que miles de ciudadanos estamos construyendo, es un partido democrático y su dirigente principal es un demócrata reformador. Somos una organización política donde caben el pensamiento pequeñoburgués y el pensamiento revolucionario. Los ojos y las ideas de los dirigentes de Morena no son los ojos y las ideas de todos los militantes ni son tampoco los de aquellos que se mantienen al margen de esta organización. En el análisis que falta, deben contemplarse las visiones de esa pluralidad para no sufrir frustraciones
Yo estoy seguro que de no ser Morena, ninguno de los partidos existentes podrán ser instrumentos de lucha para el cambio social. Lo que se busca para el país, lo va a lograr la fuerza que tenga capacidad para entender el momento que se vive, la que haga una caracterización adecuada de las fuerzas que concurren a la escena política nacional, quien entienda correctamente las necesidades que tiene la sociedad y la que asuma un liderazgo lo suficientemente fuerte y sensible ante los acontecimientos que sacuden al país
Quien a toro pasado critica a Morena porque no pudo impedir la Reforma energética, no está haciendo un análisis correcto de la situación que vive México. No ha estudiado suficientemente su historia, su descomposición social y el entreguismo de las llamadas “clases políticas” La responsabilidad de la izquierda, de su dispersión, de su incapacidad para unir programas y luchas, sigue siendo suya. La institucional, la modosita, ya no tiene remedio, ha perdido su credibilidad política y moral, por corrupta y acomodaticia. Morena está obligada a llenar esos vacíos, a ser diferente y a convertirse en una fuerza democrática para lograr un verdadero cambio a favor de los mexicanos
(*) Correo ilustrado del 14/12/13) Nos volveremos a encontrar en la 2ª semana de enero. Un abrazo a todos