Veto del gobernador Newsom evitó reducir los abusos laborales de contratistas de jornaleros en California
Nos decepciona compartir que a pesar de que casi 37,000 personas de la comunidad de Freedom United ayudaron a certificar el paso del proyecto de ley AB364 en la Asamblea y el Senado en California, el gobernador demócrata Gavin Christopher Newsom vetó la propuesta.
Freedom United / 4 Vientos
Foto destacada: Por otro veto del gobernador demócrata, los trabajadores indocumentados no podrán recibir los beneficios del desempleo en California (Getty Images).
Por ello, el mandatario demócrata no protegió a todos los trabajadores migrantes temporales en California de los abusos que cometen contratistas de mano de obra extranjera sin escrúpulos (FLC), que los vinculan ilegalmente a condiciones de trabajo explotadoras.
AB364 habría ayudado a garantizar el reclutamiento justo y ético de los trabajadores extranjeros que llegan a California al establecer un registro de FLC que les permitiría ser monitoreados y reducir drásticamente la oportunidad de explotación.
En su blog, Daniel Costa, director de Investigación de Leyes y Políticas de Inmigración y exasesor principal del fiscal general de California sobre temas de inmigración y trabajo, reveló las inexactitudes del mandatario en su mensaje de veto.
“Muestran (los argumentos del mandatario) una falta de comprensión de lo que se necesita para combatir el trabajo forzoso de los trabajadores migrantes temporales, así como un compromiso insuficiente con los derechos de los trabajadores migrantes al más alto nivel en California”, destacó el también académico visitante en el Centro de Migración Global de la Universidad de California-Davis.
Subrayó igualmente que la regulación de los intermediarios laborales extranjeros es desesperadamente necesaria porque “la fase de reclutamiento es donde ocurren muchos abusos” contra los trabajadores migrantes y las actividades de los reclutadores “prácticamente no están reguladas”.
Expresó: “La regulación de los contratistas de mano de obra agrícola también es desesperadamente necesaria y justificada, por lo que existen las reglas actuales. Los contratistas de mano de obra agrícola que ahora emplean a la mayoría de los trabajadores agrícolas en California son los peores infractores de las leyes de salarios y horas en las granjas: representaron la mitad de todas las violaciones detectadas por el Departamento de Trabajo de los Estados Unidos entre 2005 y 2019.”
Así, el abogado retomó el tema del veto destacando que el gobernador Newsom señaló que los contratistas laborales extranjeros, también conocidos como “intermediarios laborales internacionales”, ya están regulados y, por lo tanto, AB 364 crearía un proceso redundante para ellos.

Jornaleros mexicanos en California (Foto: Agencia AP)
“Pero eso no es cierto. El mandatario considera a los contratistas de mano de obra agrícola son un ejemplo a seguir en todo el sector laboral californiano, pero en realidad no lo son”.
También afirmó que Newsom parece estar preocupado porque algunos contratistas de mano de obra agrícola pueden reclutar y contratar a trabajadores migrantes mediante el programa de visas H-2A, el cual permite a los empleadores estadounidenses contratar migrantes para labores temporales en el campo.
Explicó que AB 364 regula la actividad que se lleva a cabo principalmente en el extranjero; es decir, cuando los intermediarios laborales internacionales o extranjeros, que pueden ser individuos o empresas, reclutan migrantes en los países de origen para trabajos temporales en los Estados Unidos.
“Las reglas existentes que se aplican a los contratistas de mano de obra agrícola regulan la actividad de esos contratistas en su calidad de empleadores agrícolas que operan en los Estados Unidos; no lo que hacen fuera del país”, manifestó.
Incluso si lo que citó el gobernador Newsom fuera cierto sobre una redundancia en la regulación, “solo representaría un pequeño subconjunto de los trabajadores migrantes” que necesitan las protecciones de AB 364.
“Suponiendo que cada trabajador agrícola H-2A es empleado por un contratista de mano de obra agrícola que los reclutó en el extranjero, solo representaría alrededor de 30,000 trabajadores, o aproximadamente el 10% de todos los trabajadores migrantes temporales en California”.

Foto: Freedom United.
Costa consideró que esta suposición carece de evidencia, lo que significa que es más probable que la gran mayoría de los trabajadores migrantes temporales en California estén desprotegidos.
Aparte, recordó que la segunda razón del gobernador para vetar el proyecto de ley era que la categoría de visas que cubría era “demasiado amplia”, y que regulaba “programas de visas que normalmente no se considerarían programas de visas de trabajadores”.
El problema es que solo se da un programa como ejemplo: la visa L-1 que permite la transferencia dentro de la empresa de empleados de oficinas extranjeras a los Estados Unidos.
El especialista concluyó: “Por ahora, los trabajadores migrantes con visas temporales, muchos de los cuales fueron aclamados como ‘esenciales y “héroes” durante la pandemia, tendrán que esperar protecciones estatales o federales significativas de los intermediarios laborales que los explotan, roban y trafican con ellos”.
Días antes de frenar AB 364, Newsom inmovilizó el proyecto de ley AB 2847 que buscaba crear un programa piloto para ampliar los beneficios del desempleo a los trabajadores indocumentados.
Y hace un año, el gobernador se involucró en otra controversia cuando paró un proyecto de ley que habría relajado la votación para organizar a los trabajadores agrícolas en sindicatos, eliminando el voto secreto.
El proyecto Assembly Bill 616, habría permitido que los jornaleros agrícolas recibieran las papeletas en sus casas y las rellenaran fuera del lugar de trabajo. Anteriormente todas las elecciones sindicales se celebraban de manera personal como elecciones de voto secreto.