Un pantano la ruta por dirigir al PAN

Comparte en redes sociales

Terrible y triste la guerra intestina en Acción Nacional con miras al relevo de Gustavo Madero al frente del Comité Ejecutivo Nacional.

Manuel Narváez Narváez/ A los Cuatro Vientos

Lo que pudiera ser una oportunidad para reivindicarse ante los mexicanos y los electores, y recuperar un poco de credibilidad, se está convirtiendo en un modus vivendi de las cabezas visibles del PAN: Esto viene a confirmar la profunda fractura interna que no permite, ni por asomo, ninguna posibilidad cercana de sanación.

Entre más se acercan los plazos para la batalla final, donde la militancia elegirá al (la) sucesor (a), o reelección de Madero Muñoz, los graves señalamientos de corrupción entre las tribus internas, asemejan más un aparato digestivo que una plataforma de altura para el intercambio de ideas y propuestas.

En mi colaboración anterior compartí los nombres de quienes buscan tomar las riendas del panismo del 2014 al 2017, un año antes del relevo presidencial. Reitero: Josefina Vázquez Mota, Ernesto Cordero y Gustavo Madero; al menos son los que tienen mayores posibilidades de conseguir el objetivo.

josefina y cordero

Josefina Vázquez Mota y Ernesto Cordero, en busca de la presidencia del PAN

Cualquiera pensaría que el PAN, por mucho tiempo una oposición real, objetiva y constructiva, hasta antes del 2000, debería apelar a los criterios democráticos que lo caracterizaban en sus contiendas internas, invocar los espíritus de sus fundadores y reincorporarse a la senda de la congruencia con el objetivo de levantar el entusiasmo de sus bases y sacudirse los escombros de las derrotas, pero no, parece que los odios surgidos como consecuencia del poder presidencial ejercido por doce años, si no han extinguido la flama de los principios, por lo menos los han arrastrado a las cañerías de la política barata que son las venas de este país.

Por un lado, el senador Ernesto Cordero presiona, empuja y exige la pronta salida de Gustavo Madero como presidente del CEN. En principio, al aspirante de la tribu calderonista le asiste la razón, ya que no es posible que el dirigente nacional, al ser un aspirante más, sea juez y parte de la contienda.

A su vez, Josefina le atiza al fuego cuando lanza leños ardientes en contra de las prácticas corruptoras que la élite panista clonó y adoptó del PRI. Y si la temperatura todavía no es suficiente para calentar bollos, el grupo de exgobernadores que respaldan a la excandidata presidencial, exigen el retiro de la coordinación de diputados federales a Luis Alberto Villarreal, uno de los brazos armados (políticamente hablando) de Gustavo.

Los chepinistas: Fernando Canales, Ernesto Ruffo, Carlos Medina y Fernando Elizondo, Barrio no porque al igual que Javier Corral, siempre llevan la contra; piden la cabeza del diputado guanajuatense que pastorea al rebaño azul en San Lázaro, argumentado que se encuentra bajo sospecha de cobrar el diezmo a alcaldes panistas que recibieron presupuesto extras gracias a las “intervenciones” de Villarreal y Jorge Villalobos, el tesorero del GPPAN.

madero y epn foto Germán Canseco

Gustavo Madero, quien busca reelegirse como presidente del PAN, firmó el Pacto por México legitimando al presidente de la república Enrique Peña Nieto, a quien antes acusó de haber ganado la elección a “puros billetazos”

Y Madero, que ha sido toda una revelación, muy cuestionada por cierto, tanto por la propia militancia, como por analistas políticos, que lo ubican como uno de los presidentes del partido con más contiendas constitucionales perdidas; cercanísimo al presidente Peña Nieto al que legitimó a través del “Pacto por México”, después de acusarlo de comprar a billetazos la elección presidencial; consentido de los casineros regiomontanos, que presuntamente lo apoyaron con dos millones de dólares durante su periplo por la dirigencia de Acción Nacional, saca provecho del cargo y de los tiempos oficiales del partido, para promover su imagen personal.

Lo más triste de todo, primero porque las posturas de sus grupos parlamentarios han resultado desastrosas frente a las reformas “estructurales” (sic) impulsadas por el ejecutivo federal, y segundo porque han renegado de su vocación democrática y republicana al promover una “reforma política” que simplemente robustece el centralismo del poder y no la disminución del aparato legislativo, ni la reducción del costo de las elecciones, muchos menos la eliminación de privilegios y prebendas de esta casta divina.

Con este panorama, y de acentuarse en las siguientes semanas, difícilmente el PAN podrá recuperar credibilidad entre la sociedad y los electores. Pese a que la izquierda está todavía más fraccionada que el panismo mismo y el PRI gastadísimo por mentiroso como siempre, no se ve por donde los azules puedan ganar confianza y recuperar los espacios que necesitan para ser competitivos en el 2018.

manuel-narvaez1*Manuel Narváez Narváez. Jarocho de nacimiento en el 65, y chihuahuense por adopción desde el 82. Ex alumno de la FCA de la UACH. Ex -Diputado Federal y Local por Chih., ex Delegado de la Reforma Agraria. Múltiples cursos de Marketing Político y de Seguridad Nacional en USA. Analista Político y editorialista de diversos medios de comunicación desde 1988. Director del periódico digital alcontacto.com.mx  ( mnarvaez2008@hotmail.com, Twitter; @manuelnarvaez65)

Comparte en redes sociales

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *