SAETAS: Autobiografía del profesor y comunista chihuahuense Antonio Becerra Gaytán

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Terminé de leer el libro autobiográfico del profesor Antonio Becerra Gaytán. Lo primero que hago es felicitar a Jesús Vargas Valdez, autor y ejecutor de la iniciativa para realizar una serie de entrevistas a diversos personajes y comenzar a publicarlas en una colección llamada Testimonios de la Razón, trabajo arduo, necesario y que requiere una alta dosis de compromiso profesional con la historia, así como con los anhelos de transformación social.

 

Víctor Orozco* / Edición 4 Vientos

Foto destacada: A la izquierda, el profesor Becerra en compañía del cantante Oscar Chávez (derecha) (Facebook).

 

La vida de Antonio Becerra es de aquellas difíciles de sintetizar o encasillar. En las entrevistas aparecen sus múltiples tránsitos: de joven profesor inexperto y hasta ingenuo, a la de dirigente político, militante comunista y figura indispensable hasta hoy en la historia de Chihuahua desde los años sesenta del siglo pasado.

Me ufano de que a mi generación nacida al término o en las postrimerías de la segunda guerra mundial, le ha tocado vivir toda la película de los cambios en la geopolítica mundial, pero sobre todo en los provocados por las revoluciones científicas y tecnológicas, casi sin precedentes en la historia.

Sin embargo, la generación a la que pertenece el profesor Becerra, -quien alguna vez fue mi maestro en la antigua Escuela Preparatoria de la UACH– por venir algo más lejos, con seguridad experimentó estas mutaciones con mayor intensidad.

Becerra ha sido un hombre de un rango y tipo para nada comunes y fáciles de encontrar. Se desempeñaba como un férreo dirigente comunista durante un tiempo durante el cual en los partidos de este corte imperaba la disciplina cuasi militar, combativo en los argumentos cuando había que defender una posición, como lo llegué a constatar, apoyándolo o contradiciéndolo, valiente líder social que no se amilanaba ante la represión.

Le recuerdo un pasaje de un discurso en la plaza de armas de Chihuahua por los años sesenta: “Los comunistas somos como los árboles: entre más nos podan más crecemos”.

 

El profesor Becerra, en 2015 (Captura de pantalla en Youtube).

 

En 1969, en plena represión del gobierno de Gustavo Díaz Ordaz, sufrió de secuestro y tortura.

Quizá lo hubiesen desparecido si no hubiera sido porque se había ganado a pulso un liderazgo político y moral en Chihuahua, a cuya consecuencia miles salimos a las calles demandando su libertad.

De este episodio tengo en la memoria dos recuerdos:

1.- Una comisión de ciudadanos fuimos a protestar con el gobernador Oscar Flores y éste nos respondió a su modo: “Ustedes no saben jovencitos que jalan más dos tetas que una carreta”, asegurando que Becerra andaba de juerga.

2.- El día que lo liberaron teníamos un mitin, en el cual yo fungía como “maestro de ceremonias“, según le llamábamos a quien anunciaba a los oradores. Cuando mencioné la llegada del profesor, estalló la alegría y a muchos se les rodaban las lágrimas por la emoción.

 

El maestro durante un mitin político en Chihuahua (Foto: Morena Chihuahua).

 

Era todo esto, pero al mismo tiempo el maestro afable que respondía con sencillez a las preguntas de alumnos o campesinos. También un dirigente partidario que podía sostener una relación cordial y hasta amistosa con funcionarios públicos o de otras organizaciones, no solo de la izquierda, sino del partido oficial o de las derechas.

Leí el libro de un solo tirón e infinidad de reflexiones se me vinieron a la cabeza provocadas por las narraciones de Becerra, por sus cuitas y pensamientos en torno a tantas coyunturas vitales a las que tocó de cerca o a profundidad.

Como a muchos lectores, sobre todo chihuahuenses, cuando leía sus largos párrafos a veces medio inconexos, me asaltaba aquel dicho latino: “De te fabula narratur” (“De ti hablamos”), pues tuve la suerte de tratar al profesor Becerra como alumno, colega maestro, compañero y camarada en las luchas políticas y sociales, a veces en coincidencia y a veces en ruidosas contradicciones.

Puedo recordar de él infinidad de anécdotas y episodios, resaltando siempre la amistad y el respeto que, a lo largo de los años. le he guardado.

¡Enhorabuena por la publicación de este libro!

 

* Víctor Orozco. Historiador. Licenciado en Derecho. Académico y Defensor de los Derechos Universitarios en la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ). Laureado con la medalla al mérito cultural Hugo Rascón Banda.

Ensenada, B.C., México, sábado 15 de abril del 2022.

 


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