Memoria y olvido.
La cultura del espectáculo siempre está a la caza de novedades. Y si las novedades son escandalosas mejor. Un policía teniendo sexo en una patrulla es más noticia que una cámara de senadores sodomizando a todo el país.
Un jornalero que muere en el patio de un hospital es noticia después de que fallece. No fue noticia los cinco días que agonizó. La niña genio era noticia porque la mencionó una revista de Estados Unidos. Ahora es más noticia porque quedó eliminada de un concurso.
Ramiro Padilla Atondo/ A los Cuatro Vientos
Es esa clase de información la que muy en el fondo nos hace sentir bien. ¿Qué se cree esa mugrosa niña genio? ¡Que bueno que la pusieron en su lugar! El jornalero tuvo la culpa. Mire que querer recibir atención sin dinero. Un grupo de senadores se va de gira legislativa y en dos o tres días se gastan un millón de pesos. Eso no levanta la indignación.
¿En qué nos hemos convertido? En ciberactivistas. Nos indignamos e insultamos, peleamos, descalificamos en redes sociales. Pero a la hora de salir a la calle a defender nuestros derechos nos hacemos pendejos. Lo más divertido es la invitación a un evento. Todos ponen que asistirán, pero de los mil cuatrocientos invitados llegan quince. Y de esos quince doce llegan pegados a sus teléfonos. No quieren perder las actualizaciones.

La nomofobia (no-mobile-phone phobia) es el miedo a no tener siempre a mano el teléfono móvil,
Dicen; ¿Ya viste lo que le pasó al jornalero en sonora? ¡Qué pedo con el gobierno, wey! Y te lo dicen sin dejar de consultar el Smartphone. El colmo de los colmos. Las redes sociales son un excelente instrumento. Pero son como cualquier otra cosa que se usa en exceso. Si no se le pone límite puede terminar afectando de manera drástica la vida. Lo curioso que aquí llego a una contradicción. Este artículo está escrito y pensado para distribuirse a través de las redes sociales. Y serán muchos que tienen Tablet o Smartphone los que lo lean.
Una niña humilde de repente tiene sobreexposición. Los medios se le van a la yugular. La nefasta señorita Laura la usa para una de sus lacrimógenas y falsas historias, al igual que Rocío Sánchez en cosas de la vida con el niño indígena humillado del que ya nadie se acuerda.
Y mientras, en una galaxia política lejana, un grupo de ratas planea el próximo asalto sobre los que no se pueden defender. Al fin y al cabo los que no se pueden defender tampoco quieren apagar el televisor, que les dicta que está bien. Una propuesta muy buena sería la de pegarle una etiqueta a cada televisor como el que traen las cajetillas de cigarros. Que dijera: “la exposición inmoderada a este aparato causa efectos dañinos”. Y pusieran la foto de un tipo idiota, con cara de diputado. Ese sería un gran avance.
Familias deben imponer reglas de uso de tv, celulares e Internet, opinan pediatras**
El uso irrestricto impacta de modo profundo al niño, con graves consecuencias. Recomiendan limitar a no más de dos horas diarias el entretenimiento en pantalla
Los menores de ocho a 18 años de edad pasan un promedio superior a siete horas diarias utilizando algún medio de entretenimiento electrónico, señala un informe de la Academia Estadunidense de Pediatría
La Jornada
Chicago.- Las familias deberían elaborar un plan de uso de los medios con reglas claras para la televisión, Internet, teléfonos celulares y otros dispositivos, recomendó la Academia Estadunidense de Pediatría. Recomendó a los padres limitar el uso que hacen los niños del Twitter y los mensajes de texto, así como mantener los teléfonos multiuso y las computadoras portátiles fuera de sus dormitorios. Un grupo importante de pediatras dice que los padres deben saber que el uso irrestricto de los medios puede tener consecuencias graves, como violencia, ciberacoso, bajo rendimiento escolar, obesidad, insomnio y otros problemas asociados.
Las recomendaciones presumiblemente causarán sorpresa e indignación entre muchos adolescentes, pero un grupo de pediatras dice que los padres deben saber que el uso irrestricto de los medios puede tener consecuencias graves. Muchos padres no tienen ni idea del impacto profundo que puede tener sobre sus niños la exposición a los medios, afirmó Victor Strasburger, autor central de la nueva política de la academia de pediatría.
Este es el siglo XXI y necesitan adaptarse a él, precisó Strasburger, especialista en medicina de adolescentes en Nuevo México. La política abarca a todos los niños, incluso los que utilizan teléfonos multiuso, computadoras y otros dispositivos conectados a Internet. Insiste en las antiguas recomendaciones de la academia de prohibir los televisores en los dormitorios de niños y adolescentes, así como limitar a no más de dos horas diarias los entretenimientos en pantalla.”
De acuerdo con la nueva política, esas dos horas que se mencionan incluyen el uso de Internet para entretenimiento, incluso Facebook, Twitter, televisión y películas. La excepción es el uso de la red para hacer las tareas escolares.
La academia cita un informe de 2010 según el cual los menores de ocho a 18 años pasan un promedio superior a siete horas diarias utilizando algún medio electrónico para entretenimiento.
Muchos niños ven ahora televisión en línea y muchos envían mensajes de texto desde sus dormitorios después de la hora de apagar la luz, incluso imágenes sexuales explícitas por teléfono celular o Internet, y aun así pocos padres establecen reglas sobre el uso de esos medios, dice la nueva política.
Te garantizo que si tienes un hijo de 14 años y tiene conexión con Internet en su cuarto, está viendo pornografía, precisó Strasburger. La política hace notar que tres cuartas partes de los niños de 12 a 17 años tienen teléfonos celulares; casi todos los adolescentes envían mensajes de texto, y muchos niños tienen teléfonos que les permiten acceder a Internet.
Los jóvenes pasan ahora más tiempo con los medios que en la escuela; es la actividad principal para niños y adolescentes aparte de dormir, agrega.
No despreciamos a los medios, indicó la doctora Marjorie Hogan, coautora del documento. Nos encantan, agregó, y aclaró que la cuestión es cómo utilizarlos correctamente. Hogan, de la Universidad de Minnesota, en Minneapolis, explicó que la tecnología puede influir en la vida de los niños de varias formas positivas. Algunos programas de televisión, como Plaza Sésamo, demostraron ayudar a prescolares a aprender o generar empatía.
Más niños tienen acceso a los celulares que hoy tienen más poder de uso de una computadora de bolsillo que hace una década, sostuvo. Pero la televisión sigue siendo el medio predominante entre niños y adolescentes, según Hogan. Más niños pasan más horas frente a la tv que delante de otros medios, concluyó.
**Nota publicada en http://www.jornada.unam.mx/2013/10/30/sociedad/039n1soc
*Ramiro Padilla Atondo. Ensenadense. Autor de los libros de cuentos A tres pasos de la línea, traducido al inglés; Esperando la muerte y la novela Días de Agosto. En ensayo ha publicado La verdad fraccionada y Poder, sociedad e imagen. Colabora para para los suplementos culturales Palabra del Vigía, Identidad del Mexicano y las revistas Espiral y Volante, también para los portales Grado cero de Guerrero, Camaleón político, Sdp noticias, El cuervo de orange y Péndulo de Chiapas.