Los analfabetismos: el absoluto, el funcional y el ético-social
Todavía he visto en algunos salones de clases de primer grado, de primaria, los dibujos sobre cartoncillo que nos ayudaban a memorizar las letras a los que fuimos niños hace más de 50 años. Eran unos carteles de 75 cm por 75 cm; la profesora, por ejemplo llenaba uno con letra script con mayúscula y minúscula la letra “S” y con letra “pegada” o cursiva la misma letra, además con el dibujo de una serpiente, nos decía “esssta es una ssserpiente, ¿Cómo ´hacen´ las ssserpientes? La mayoría del grupo respondía “sss sss”.
Jorge Domínguez González/ A los Cuatro Vientos
L@s profesor@s al menos, al principio y al final del año escolar tomaban la velocidad de la lectura de cada alumno y también había exámenes de “lectura de comprensión” y de “ortografía”. Lo más importante para l@s profesor@s de la mayoría de todos los grados y en todos los grupos (a veces, de más de cincuenta alumnos) era que leyeran y escribieran “bien”. Es decir, usaban el método normativo para la enseñanza de la lengua, que leyeran y escribieran conforme a la norma. Junto con lo que implica el aprendizaje de esta metodología de enseñanza es transferir a lo ético-social de que existen personas “superiores” a cada uno de nosotros que saben todo y de que hay que cumplir las leyes; luego, de la escuela transferiríamos esta actitud hacia los jefes en el trabajo, o al gobierno, a las altas jerarquías de la divinidad en la tierra, etc.; nos enseñaron a obedecer y callar; esta fue una de tantas influencias que contribuyeron a la moral que poseemos actualmente la mayoría de los mexicanos.
Al fin, en el largo camino del estudiante de bajos ingresos era alto el porcentaje de quienes no concluían la educación básica por no “saber” leer, no obstante si habían aprendido formas conductuales para mantener el orden establecido. Existían y todavía hay obstáculos para todos y para algunos: padres que no dan ejemplo de usar la lecto-escritura; ahora hasta madre ausentes del hogar para trabajar; la lejanía del plantel escolar; aunque la agüela Constitución ya es casi centenaria y lo trae bien escrito en sus faldas en su artículo 3°, Fracc. IV, “Toda la educación que el Estado imparta será gratuita”, no ha sido así, la Suprema Corte de Justicia nos ha protegido, de entre muchos derechos, de ese derecho, nos ha guardado, nos ha escondido a los ciudadanos del ejercicio de varios derechos como el de recibir toda la educación gratuita o ser restituidos de tierra y aguas. En conclusión: el entorno económico, social y cultural de cada alumno influye en los aprendizajes de cada alumno. El porcentaje de analfabetas absolutos de aquellos tiempos a estos ha disminuido, a mi ver, en parte por acción del Instituto Nacional para los Adultos y en parte por la naturaleza de uno de los factores demográficos; de estos analfabetas absolutos quienes “no sabían ni la ´O´ por lo redondo“ habrá quienes superaron esa condición, de manera natural y por si mismos, por su contacto con la sociedad.
En un entorno social más deteriorado que el ya descrito pero, con mayor amplitud y sutileza de la corrupción, a mediados de la semana aprobada la creación de Fiscalía Nacional contra la corrupción (¿funcionará?); con la violencia enmedio de los caminos; buscando a quienes “malfingen” gobernar en su ámbito gubernamental e internalizados los valores de la cultura del silencio y la sumisión. Formados y afianzados los valores de la riqueza y el poder como los ideales en el horizonte de nuestra vida ¿Cómo, los niños y adolescentes reflexionan lo que decimos y hacemos los adultos y peor cuando se contradicen los “decires” y los “haceres”? A mi parecer, el Chihuahua de hoy requiere de seres humanos con valores, realmente, diferentes a los que hoy priman ¿Son solamente los jóvenes, desde la educación media superior, quienes con ostentación y soberbia conducen sus autos? ¿y sus padres? ¿Cuánto tiempo se dedica para el aprendizaje y la realización de proyectos académicos y cuántos al modelaje y cuidado de sus autos? La tendencia que tenemos los humanos y sobre todo los docentes es de reproducir la forma en la cual hemos sido enseñados pero, a mi entender es por lo anterior que a pesar de que sabemos reconocer unos signos gráficos y luego reproducir los sonidos que representan que existimos quienes somos analfabetas funcionales, quienes tenemos que releer hasta tres veces un mensaje para comprender las instrucciones o el mensaje o no podemos llenar una solicitud de empleo o una carta para expresar amor u otro sentimiento a otras personas, esto nos pasa a los analfabetas funcionales.
Si bien es cierto que la familia y el entorno cercano contribuyen con sus valores en la educación de los futuros ciudadanos, los cuales no siendo ciegos, observan las acciones de las instituciones privadas y del Estado y en ellos inciden los medios de difusión con ideas proclives para el desarrollo de esta etapa del sistema económico como lo es el generalizado individualismo y consumismo que, casualmente, uniforma a la mayoría de jóvenes. Me pregunto a mi mismo, yo solo ¿Hasta dónde es mi responsabilidad en este mundo? ¿En este país o en mi entorno? No he quitado a otros lo que producen, no he callado ante la injusticia, no soy amigo de la soberbia.
A veces, me parece que vivo en un mundo de peyote y hongos. Quienes protestaron por la presencia de un candidato que ahora es presidente del país fueron los estudiantes de una universidad para gente con suficientes ingresos económicos; allí fue dónde surgió el movimiento “#YoSoy132”, a mi ver, allí fue donde se reivindicó, en un principio, el hecho de ser joven. Luego, el fenómeno socio-económico y político actual con gran presencia juvenil de las marchas por la liberación o no extradición de una persona dedicada al narcotráfico.
En tanto, en el estado de Chihuahua, algunos de los gobiernos municipales que cuentan con páginas electrónicas, a los 100 días en el cargo, habían actualizado los datos de sus páginas electrónicas pero, si en ese tiempo elaboraron su programa de gobierno, el cual se supone que fue el elemento fundamental en una democracia con el cual los partidos políticos habían debatido en el tiempo previo a las elecciones. La cantidad de recursos que reciben los municipios como recursos propios o de otros niveles de gobierno son datos cuasi secretos, ya no digamos sobre el gasto de esos recursos. Doña transparencia está ausente de las prácticas gubernamentales y privadas. En tanto, los estudiantes, estudiando, los que trabajan, trabajando y los extraterrestres abduciendo…con esta cultura vivo y convivo.
“Defendamos el ecosistema del Río Casas Grandes”