Diputados exigen al gobierno contener a la tuberculosis, hoy epidemia “alarmante” en BC

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La epidemia de tuberculosis en Baja California registra un crecimiento que el congreso local ya identifica como “alarmante”. En 2016 el mal ubicó a la entidad en primer lugar nacional por onceavo año consecutivo, y en las primeras 13 semanas de 2017 sumó 539 nuevos casos, lo que mantiene al estado en un lóbrego liderazgo en México.

Javier Cruz Aguirre / A los 4 Vientos

11 de abril del 2017.- Por ello, el poder legislativo aprobó de manera unánime un punto de acuerdo para solicitar de manera inmediata a los gobiernos estatal y federal, que destinen recursos económicos suficientes y urgentes para combatir la epidemia de la enfermedad que priva en Baja California.

El diputado Miguel Osuna Millán, presidente de la Comisión de Salud de la XXII Legislatura estatal y hermano del ex gobernador José Guadalupe, presentó el punto de acuerdo al pleno del congreso con un subrayado: “en la entidad se han incrementado en forma alarmante los casos de personas con tuberculosis”.

El panorama oficial de la crisis sanitaria la develó a plenitud el Boletín Epidemiológico del Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica, bajo responsabilidad de la Dirección General de Epidemiológica de la Secretaría Federal de Salud y Asistencia (SSA).

El documento que consultó A los 4 Vientos el 10 de abril por la noche, revela que Baja California sumó en 2016 un total de dos mil 114 casos de todo tipo de tuberculosis, es decir 175 más que el segundo lugar que fue Veracruz con mil 939.

De la cantidad que se dio en la entidad norteña, la tuberculosis respiratoria representó mil 700 casos (514 mujeres y el resto hombres), seguida por “otras formas” de la enfermedad contagiosa con 381 (170 mujeres), y la meningitis tuberculosa con 33 (12 mujeres).

Pero del 1 de enero al 1 de abril del 2017 se registró un importante repunte en la estadística. La tuberculosis respiratoria aportó 344 nuevos casos, de los cuales 163 fueron en mujeres; “otras formas” significaron 79 (26 mujeres) y la meningitis tuberculosa contribuyó con nueve expedientes, seis de ellos en hombres para sostener el primer lugar nacional.

Imagen: El Blog de la Pulmonía

El 14 de enero de 2016, A los 4 Vientos platicó con el doctor Luis Alejandro Pulido Espinoza, entonces responsable del Programa de Tuberculosis de la Jurisdicción de Servicios de Salud Ensenada, quien reveló que la persistente presencia de la enfermedad en Baja California llevó a la conclusión de que la epidemia debía ser atendida de manera multidisciplinaria.

Anunció que el gobierno estatal trabajaba en la atención integral de una enfermedad que dejó atrás el mito de ser provocada exclusivamente por la migración, y adelantó que sin ser aún un proyecto con el respaldo de las autoridades estatales, epidemiólogos de Ensenada proyectaban presentar dos alternativas para tener un mayor control de la enfermedad y los enfermos:

1.- Pedir apoyo presupuestal para construir una sitio que brinde atención continua, especializada e integral a los pacientes hasta que terminen su tratamiento de seis meses, incluida alimentación, rutinas de ejercicio y medicamentos.

2.- Solicitar a los legisladores una ley que fortaleciera el tratamiento completo de los enfermos, que evitara la discriminación de los contagiados y que éstos no abandonaran el proceso de rehabilitación porque contaminarán a la población sana y morirían sin seguimiento sanitario.

A casi 15 meses de esa charla periodística, el diputado Miguel Osuna Millán dijo a sus colegas que para enfrentar la crisis sanitaria que amenaza con extenderse a la población, se debe exhortar al secretario de Salud en Baja California -Guillermo Trejo Dozal- para que gestione ante la federación y el Estado, recursos económicos “suficientes para combatir la epidemia y que permitan la adquisición de fármacos” para los pacientes enfermos con tuberculosis.

– “Si bien es cierto que ésta enfermedad se había erradicado de Baja California, también lo es que actualmente el padecimiento infeccioso y contagioso, ocasionado por el Mycobacteryum Tuberculosis, está en aumento”, enfatizó.

La detección oportuna de la enfermedad es fundamental para la exitosa recuperación del paciente (Internet).

Su llamado a la acción inmediata logró que los diputados solicitarán recursos económicos suficientes para contratar a personal capacitado y dar seguimiento a los pacientes enfermos, así como para llevar a cabo “las acciones del programa estatal para la detección, diagnóstico y curación de todos los pacientes de tuberculosis”.

Y aleccionó a sus correligionarios al explicar que el padecimiento afecta principalmente a los pulmones, ocasiona tos y flema que puede durar más de quince días, acompañada generalmente con fiebre y pérdida de peso.
 
– “Se contagia cuando una persona enferma de tuberculosis tose o estornuda, al escupir bacterias que afectan principalmente a las personas que conviven con él, niños y adultos por igual”.

Asimismo informó que las personas con un alto grado de contagiarse son aquellas que padecen enfermedades como diabetes, desnutrición, alcoholismo o VIH.

Al respecto, el doctor Luis Alejandro Pulido manifestó A los 4 Vientos en enero del 2016, que sin descartar el factor tradicional de la población migrante, el sector Salud realiza el seguimiento de padecimientos para conocer si un sospechoso de tener tuberculosis es cero positivo a VIH.

También se mide su estado de nutrición, niveles de colesterol, azúcar en la sangre, si es alcohólico o drogadicto, si pertenece a un grupo socialmente vulnerable, si vive en hacinamiento o en condición de calle.

– “Incluso tomamos en cuenta la situación del cambio climático o el hecho de vivir en zonas ubicadas por debajo del nivel del mar, lo que también provoca la enfermedad”.

La obesidad mórbida es un facto de riesgo para contraer tuberculosis (Archivo).

Otro aspecto a revisar es la desnutrición que padece una persona en los dos lados del problema: los que no comen y los que comen en exceso.

– “Si revisamos estadísticas en obesidad, Baja California tiene números muy altos que nos llevarían a diabetes. Las dos enfermedades provocan una deficiencia en la defensa de los pacientes y si vivimos en una zona con una alta carga de tuberculosis, estos padecimientos los hace susceptibles a enfermarse de tuberculosis, igual a como sucede con el VIH.”

Respaldó sus palabras con cifras: la frecuencia de casos a nivel nacional es de que el 20 por ciento de tuberculosis pulmonar se da en diabéticos, y Ensenada tuvo 13 por ciento en 2014 y en noviembre de 2015 bajó a 7.25.

En Virus de Inmunodefiencia Humana (VIH) la estadística reporta entre 15 y 8 por ciento, “pero el año pasado (2015) tuvimos seis por ciento y hoy (enero de 2016) tenemos 10.36 por ciento”.

Finalmente, destacó que existe cierto estigmatismo a los tuberculosos, lo que es una carga emocional  y social que se agrega a la enfermedad.

– “Hemos encontrado casos de empleadores que los han despedido (a los contagiados) en lugar de ayudarlos, dándoles la oportunidad de llevar trabajo a su casa. ¡Eso es una pena!” (Con información del Congreso de Baja California).


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