Demasiados humanos para este planeta
“No entiendo por qué cuando destrozamos algo creado por el hombre lo llamamos vandalismo, pero cuando destrozamos algo creado por la naturaleza lo llamamos progreso.”
Ed Begley Jr.
Son fotos -cuentos como alguna vez explicó Julio Cortázar al comparar a los cuentos con la fotografía- que dan cuenta de nosotros, de nuestra relación con nosotros mismos y con lo que nos rodea.
Bárbara Sánchez / El País
Son fotos que dan cuenta de nuestras pisadas por la tierra, y de nuestras huellas, que son como las de Atila: “por donde pisa mi caballo, no vuelve a crecer la hierba”. Son cuentos que cuentan de nuestra guerra con la naturaleza. Dicen que una imagen vale más que mil palabras. Es cierto. Aquí está la muestra de ello:
“Agua y aire, los dos elementos esenciales de los que depende toda vida, se han convertido en dos contenedores globales de basura”, Jacques-Yves Cousteau. La fotografía, tomada en Java (Indonesia), la isla más poblada del mundo, muestra al surfista indonesio Dede Surinaya tomando una ola que arrastra una gran cantidad de basura. El libro ‘Overdevelopment, Overpopulation, Overshoot’ recoge instantáneas como esta para mostrar las “tragedias sociales y ecológicas” que generan el crecimiento de la población mundial y el consumo. Las imágenes aparecen acompañadas de citas de científicos, escritores o ecologistas, que aquí se reproducen, pues según explican sus autores, la imagen y el texto crean una “sinergia” que ayuda a comprender ese impacto en el medio ambiente que la publicación pretende denunciar.
“Todos nuestros problemas medioambientales son consecuencias negativas que no habíamos anticipado y que derivan de nuestra tecnología. No hay base para creer que la tecnología dejará, de forma milagrosa, de causar nuevos e inesperados problemas, al mismo tiempo que soluciona los que previamente ya ha generado”, Jared Diamond. Vista aérea de una zona rica en alquitrán, en Alberta (Canadá). Los trabajos de la industria minera y las colas de desechos tóxicos son tan abundantes, que pueden incluso verse desde el espacio.
“Seguramente el destino de los seres humanos sea como el de los animales; el mismo destino les aguarda a ambos: si uno muere, también muere el otro. Todos tienen el mismo aliento…”. La Biblia, Eclesiastés, 3:19. En las remotas islas Midway, en el Pacífico Norte, donde se hizo esta fotografía de un albatros muerto por ingerir demasiado plástico, lejos de los flujos comerciales, también se aprecia el impacto negativo del consumo. El libro está editado por la plataforma Global Population Speak Out, que ha puesto en marcha una campaña con activistas, académicos y ciudadanos para concienciar sobre el riesgo del “enorme y rápido crecimiento” de la población mundial.
“Somos esclavos en el sentido de que para sobrevivir a diario dependemos de un imperio industrial que sigue una lógica de expandirse o desaparecer —una máquina chiflada—, que los especialistas no pueden comprender y los gestores no pueden gestionar. Lo cual está, además, devorando los recursos mundiales de forma exponencial”, Edward Abbey. Fotografía de un ‘campo’ de invernaderos en Almería (España).
“Tenemos que darnos cuenta de que no solo cada región tiene una capacidad de aguante limitada, sino que esa capacidad se está reduciendo y la demanda, creciendo. Hasta que esta idea sea una parte intrínseca de nuestro pensamiento y ejerza una poderosa influencia en la configuración de nuestras políticas nacionales e internacionales, apenas vamos a poder ver en qué dirección se mueve nuestro destino”, William Vogt. Vista aérea del incendio de la plataforma petrolífera de BP ‘Deepwater Horizon’, en el Golfo de México. La explosión, en abril de 2010, provocó el vertido al mar de cinco millones de barriles de crudo.
“No entiendo por qué cuando destrozamos algo creado por el hombre lo llamamos vandalismo, pero cuando destrozamos algo creado por la naturaleza lo llamamos progreso”, Ed Begley Jr. En la imagen, el campo petrolífero Ken River, en California (EE UU). Comenzó a explotarse en 1899 y es el quinto campo petrolífero más importante del país. Las imágenes incluidas en ‘Overdevelopment, Overpopulation, Overshoot’ reflejan temas como la explosión demográfica, la industria de la alimentación o la escasez de agua potable.
“La isla está llena de agujeros, a través de los cuales sale el agua del mar, inundando áreas que hace 10 o 15 años no sufrían inundaciones. Hay previsiones de que la isla aguantará 50 años antes de desaparecer. Después, nos ahogaremos”, Paani Laupepa. Las islas Maldivas, en la imagen, son uno de los puntos más vulnerables al cambio climático del mundo y están amenazadas por el crecimiento del nivel del mar.