Capturan a suegro de "El Chapo" Guzmán. Obama, abierto a discutir opciones antinarco en México
Inés Coronel Aispuro es padre de la tercera esposa de Joaquín Guzmán Loera, pero también era familiar directo de Ignacio ‘Nacho’ Coronel, quien fuera el principal lugarteniente del cártel de Sinaloa.
Animal Político / Agencia NOTIMEX / Agencia EFE/ Agencia APRO
En un operativo de fuerzas federales integradas por la Secretaría de Marina, Defensa, y Procuraduría General de la República (PGR), se logró este martes 30 de abril (dos días antes de la llegada a México del presidente de Estados Unidos Barack Obama) la detención de uno de los operadores más importantes de Joaquín Guzmán Loera, alias “El Chapo Guzmán”. Se trata de su suegro, Inés Coronel Aispuro.
De acuerdo a las versiones oficiales, el suegro del Chapo Guzmán es padre de su tercera esposa, pero también era familiar directo de Ignacio Nacho Coronel, quien fuera el principal lugarteniente del cártel de Sinaloa.
Esta detención se da a unas horas de que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, llegue a México para reunirse con Enrique Peña Nieto.
Estaba en la ‘lista negra’ de EU
El pasado 10 de enero, Estados Unidos anunció la inclusión en su lista de narcotraficantes de peso al suegro de Joaquín “El Chapo” Guzmán, Inés Coronel Aispuro, y de uno de sus principales lugartenientes, conocido como Damaso López Núñez, alias “El licenciado”.
De acuerdo con la revista Proceso, en ese mes la Oficina de Control de Bienes Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, colocó a Inés Coronel, en su lista negra de narcotraficantes”.
Coronel Aispuro es padre de Emma Coronel Aispuro, la tercera esposa de Guzmán Loera.
Asimismo, en septiembre pasado, Estados Unidos también anunció acciones contra el consuegro del “Chapo”, identificado como Víctor Manuel Félix Félix.
El hombre fue señalado como responsable de las operaciones de narcotráfico y lavado de dinero para el cártel de Sinaloa en Guadalajara y en la Ciudad de México.
EU ofrece capturar al “Chapo” en 15 minutos
Destaca también que el lunes 29 de abril la agencia española de noticias EFE publicó que los Estados Unidos ofreció capturar al narcotraficante mexicano Joaquín “el Chapo” Guzmán en 15 minutos en una operación “sencilla, rápida y quirúrgica”, pero los militares se opusieron, según dijo el periodista de Proceso Jesús Esquivel.
“Los servicios de inteligencia de Estados Unidos lo tienen ubicado, saben dónde está y están listos para atraparlo”, afirmó Esquivel, que en estos días presenta su libro “La DEA en México”.
El expresidente mexicano Felipe Calderón (2006-2012) quería que Estados Unidos atrapara al líder del cartel de Sinaloa, pero el Ejército y la Marina “se opusieron y pararon la operación” debido a que en ese plan solo participaba personal estadounidense, indicó.
José Baeza, uno de los miembros de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) entrevistados por Esquivel, dijo que en dos ocasiones esa oficina entregó toda la información al Gobierno de México para atrapar al capo, pero en ambas logró escapar en cuatrimotos en la sierra.
Aseguró que el narcotraficante se mantiene libre gracias a que recibe protección de numerosos políticos que se encuentran en varios niveles de Gobierno, pero se abstuvo de mencionar sus nombres.
“El día que arresten a ciertos políticos van a descubrir muchas verdades sobre los misterios del Chapo y del cartel de Sinaloa”, comentó el agente.
El Gobierno de México, añadió, conoce el lugar donde está Guzmán Loera, ya que ha recibido informes de la DEA y de otras agencias, así como de sus propios sistemas de información militares y civiles, y tienen la lista de todos sus bienes.
El corresponsal de la revista mexicana Proceso en Washington revela en su libro que el Pentágono preparó un plan para atrapar a “el Chapo” en una operación similar a la que concluyó con la muerte de Osama Bin Laden, líder de Al Qaeda.
Según Esquivel, “Washington no ha desechado el plan” y se lo propondrá al presidente Enrique Peña Nieto, quien asumió el poder el 1 de diciembre pasado.
“La captura de este narcotraficante, si lo permitieran los mexicanos, sería algo tan fácil como arrebatarle un dulce a un niño” en una operación “sencilla, rápida y quirúrgica”, apuntó.
Precisó que ese operativo sería ejecutado por tres comandos estadounidenses entrenados en acciones clandestinas en territorio enemigo y apoyados por tres aviones de alta tecnología digital operados a control remoto y armados con misiles.
De acuerdo con el plan, las fuerzas ingresarían a la zona en helicópteros artillados y dos de los grupos se encargarían de la operación principal, mientras que el tercero cubriría las espaldas en caso de represalias de los sicarios del cartel.
“En 10 o 15 minutos los dos equipos de asalto atraparían al objetivo” durante un operativo que sería dirigido en tiempo real desde el Pentágono e incluso desde las oficinas del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca.
En el plan “no caben los militares mexicanos, y solo entrarían uniformados mexicanos para observar los resultados”.
Las tropas estadounidenses tendrían que vestir “uniformes de alguna corporación nacional como la Policía Federal”, con el fin de “simular la participación mexicana” en la operación.
Estados Unidos considera esta misión “prioritaria”, apuntó el periodista, dado que Guzmán encabeza la organización criminal más poderosa del mundo, de acuerdo con el Departamento del Tesoro.
Según informes del Gobierno mexicano, así como de las agencias estadounidenses DEA, CIA y FBI, el cartel de Sinaloa es el principal exportador de droga no solo a Estados Unidos, sino a otros países de América Latina, Europa, África y Asia.
Estados Unidos ofrece desde 2004 una recompensa de hasta cinco millones de dólares por información que lleve al arresto de Guzmán, mientras que la del Gobierno mexicano asciende a 30 millones de pesos (unos 2,4 millones de dólares).
El estado de Durango, que junto con los de Chihuahua y Sinaloa forman el llamado “triángulo dorado” de las drogas en México, es considerado uno de los posibles refugios del capo, quien en 2001 se fugó de un penal de alta seguridad.
“Si supiéramos donde está, ‘El Chapo’ habría caído”
Al respecto, el 28 de septiembre de 2012, a unas semanas del cambio de gobierno federal en México, el periódico El Universal publicó declaraciones del entonces secretario de Gobernación, Alejandro Poiré, que aseguró que si el Gobierno federal conociera el paradero de Joaquín Guzmán Loera, líder del Cártel de Sinaloa y prófugo de la justicia desde 2001, ya lo habrían detenido.
– ¿Saben si está en México “El Chapo” Guzmán?, se le preguntó en conferencia de prensa en la Secretaría de Gobernación.
– “Compañero, si supiéramos dónde está, habría sido detenido ¿no?”,
– ¿Se comenta que se sabe (su paradero)?
– “Pues si supiéramos, estaría detenido, compañero”, reiteró el funcionario federal, quien destacó que hasta el último momento de la administración calderonista “se buscará y llevará a la cárcel a los criminales más buscados por PGR, como ‘El Chapo’ Guzmán”.
En aquella ocasión Poiré dijo que la administración de Felipe Calderón Hinojosa mantendría hasta su último día la búsqueda de todos los delincuentes considerados más peligrosos, incluido Joaquín Guzmán y sostuvo que el gobierno federal saliente mantendría por igual la búsqueda de todos los 13 delincuentes más peligrosos que aún estaban prófugos, de la lista original de 37.
El encargado de la política interna del paísfialmente sostuvo que había avances en el desmantelamiento de los grupos criminales, y que prueba de ello es que de la lista original de los 37 delincuentes más buscados, 24 ya estaban detenidos o habían sido “inhabilitados”.
Temor a una tregua
Por otra parte, el pasado 29 de abril el diario The Washington Post informó que se temía que el gobierno de Peña Nieto pudiera tener una tregua con los narcotraficantes al cambiar su estrategia de seguridad en la prevención y menos en la captura de capos.
El texto relata una reunión de los cinco oficiales de primer nivel en materia de seguridad de México con estadounidenses realizada el día 15 de diciembre del 2012, donde México manifestó la intención de reducir la violencia y enfocarse a la prevención.
Estaban presentes de la secretaría de Gobernación, la Procuraduría General de la República (PGR) y “líderes del Ejército, la Marina y la agencia de inteligencia mexicana”, se informa.
De parte de Estados Unidos participaron representantes de la oficina antidrogas de Estados Unidos, Agencia Central de Inteligencia, Buró Federal de Investigaciones y el director de Oficina Nacional de Inteligencia.
“Los mexicanos permanecieron en silencio mientras se les explicaba por primera vez cómo los dos países se han entrelazado durante la batalla contra los traficantes de droga”, publicó el diario de Washington.
Cuando la reunión terminó los nuevos oficiales de seguridad permanecieron con el rostro impasible. “Ellos dijeron que estaban muy agradecidos por haber recibido tal cantidad de información“, informó el diario, de acuerdo a un funcionario de Estados Unidos que conoció de la reunión.
“Estaremos en contacto, agregaron, y se fueron”, se publicó.
La publicación del prestigiado diario estadounidense, se realizó a 4 días de la visita del presidente de Estados Unidos, Barak Obama a México.
Obama dice estar abierto a discutir opciones para combatir al narco
Jesús Esquivel / Agencia APRO
El presidente Barack Obama dijo que no prejuzgará sobre los ajustes que pretenda llevar a cabo el gobierno mexicano en materia de la lucha contra el narcotráfico y seguridad hasta hablar directamente con Enrique Peña Nieto.
“No voy prejuzgar todavía cómo esto (los cambios que quiere hacer el gobierno mexicano) alterará la relación entre Estados Unidos y México hasta que lo haya escuchado directamente, para conocer qué es exactamente lo que quieren lograr”, dijo el mandatario durante una conferencia de prensa realizada en la Casa Blanca.
En el marco de la visita que realizará a México el 2 y 3 de mayo próximos, el gobierno mexicano adelantó que en relación con la cooperación bilateral en temas de seguridad y combate al narcotráfico, se limitará y revisará el papel que desarrollan en México las agencias de inteligencia estadunidenses, como la CIA, FBI, DEA y las del Pentágono, entre otras.
Los diarios estadunidenses The Washington Post y The New York Timesinterpretaron los ajustes que quiere emprender el gobierno de Peña Nieto como la decisión inalterable de reducir la injerencia de las agencias de Estados Unidos en temas de seguridad nacional.
“Algunos de estos asuntos que él (Peña Nieto) está abordando tienen que ver con refinamientos y mejoras en términos de la manera como quieren trabajar, sobre cómo se pueden coordinar de manera más efectiva”, dijo Obama.
Añadió: “En términos generales, puedo decir que mi impresión es que el nuevo presidente está comprometido con las reformas. Ya tomó algunas decisiones importantes y creo que hará más, con lo que mejorará la economía y seguridad de los ciudadanos mexicanos, y también fortalecerá la relación bilateral”, indicó.
El mandatario estadunidense dijo que ya está listo para el viaje a México y para su reunión con Peña Nieto, y añadió que los miembros de su gabinete tendrán la primera oportunidad directa de escuchar a sus homólogos mexicanos sobre cómo se desarrollará la nueva etapa de la relación.
“Se enfocará mucho en temas económicos, hemos pasado mucho tiempo atendiendo asuntos de seguridad y pienso que en algunas ocasiones olvidamos que (México) es un aliado comercial masivo”, refirió.
El próximo viernes 3 de mayo, antes del mediodía, Obama saldrá de México hacia San José, Costa Rica, donde se reunirá con todos los presidentes, jefes de Estado y de gobierno de los países de América Central.
“Mi visión en este asunto es que queremos garantizar que nuestro hemisferio está más, efectivamente, integrado para mejorar la economía y seguridad de todos sus pueblos. Lo cual es bueno para Estados Unidos y por lo tanto mejorará nuestra economía”, remató el presidente Obama.