ANTROPANFAGOS (comer carne azul)
Miren que recurrir a la defenestración, a la mentira, a la calumnia y al lodo para descalificar a un adversario, no es de Dios. Uno como quiera los oye, pero dejen ustedes mis queridos lectores lo que yo crea, la militancia qué pensará de Cordero y Madero cuando se dan con todo por alcanzar el hueso?
Manuel Narváez Narváez / A los Cuatro Vientos
Quise iniciar mi colaboración evocando al popular programa de las lavanderas, para equipararlo con la re-elección o renovación de la dirigencia nacional el PAN, porque parece más una competencia a Karla Panini y Karla Luna, las protagonistas del mentado programa, que un contienda fraterna, de altura, elegante, con ideas y propuestas.
No es que sea yo Narvaedamus, no, para nada, lo que sucede es que si por la víspera se saca el día, ya me supongo el fango que conduce a la sede del Partido Acción Nacional, pues desde hace rato que de la boca de los suspirantes solo brincan sapos, serpientes y malas vibras.
Así es querido compatriota, los contribuyentes que hacemos posible la extravagante vida de gobernantes y políticos, esperando, aunque nunca llegue, una pizca de vergüenza por parte de los señores que afanosamente pretenden hacerse de las riendas de las dirigencias partidistas; sin embargo, sucumben ante los encantos del descrédito y la guerra sucia, sepultando las virtudes de las ideas y las propuestas.
P.D. intermedia, habrán notado que me referí a los contendientes como masculinos?, pos déjenme decirle que no soy quien para ocultarlo y mi pecho no es bodega; pues resulta que la casta partidista en México son varones, ya que ninguna mujer es tomada en cuenta para ocupar tan distinguida encomienda, salvo el caso de Cecilia Romero que ocupa provisionalmente el despacho, las contiendas internas del PAN y el PRD confirman el hecho; inclusive, son tan misóginos, que en la actualidad, todas las fórmulas están conformadas por varones. Ah, pero eso sí, como abren el pico y extienden los brazos para recitar el tema del género.
Retomando la idea de mi ocurso porque si no agarro pal monte, como las cabras. Como les iba diciendo, Ernesto quiere el puesto y a Gustavo le gustan los centavos, dirían las Karlas, pero eso es chisme. La verdad es que desde los primeros escarceos, tanto Cordero como Madero mostraron cuantas ganas se traen uno al otro y dejaron muy en claro que representan corrientes diametralmente opuestas, y antagónicas en demasía.
Por su lado, el senador con licencia, exsecretario de Hacienda y hombre de todas las confianzas del expresidente Felipe Calderón, prospecta un partido que deje de ser obsequioso con el gobierno de Peña Nieto, que lo acompañe en las agendas coincidentes, sí, pero también que sea contrapeso ante las chamuscadas mediáticas que les están propinando.
Para nadie es un secreto que Ernesto Cordero representan los intereses del expresidente y su grupo, más, cuando se trata de contener la oleada de acusaciones y señalamientos, extrañamente sin denuncias formales de por medio, en contra de las acciones de gobierno de la pasada administración que encabezó el sucesor de Fox.
No es casualidad entonces que el discurso de Cordero se centre en directas e indirectas contra Madero, ya que desde su perspectiva, el dirigente con licencia ha sido entreguista, adulador y solapador con el gobierno peñista, sobre todo cuando se trata de desprestigiar la imagen de Calderón. Estos argumentos son más que suficientes para enderezar toda una campaña de cuestionamientos hacia el chihuahuense, del que sostienen (los corderistas), es artífice o conspirador de los “moches” que pidieron legisladores afines, a ediles panistas de todo el país.
A su vez, Gustavo Madero se defiende de los embates corderistas y justifica el respaldo a las reformas propuestas por Peña, arguyendo similitudes en los contenidos con la plataforma legislativa de Acción Nacional con respecto a las reformas en educación, laboral, energética, de comunicaciones y política.
Madero está convencido de que forma parte de una generación que se atrevió a reformar profundamente el andamiaje para el desarrollo de México. También se considera el reformador de la conciencia interna del partido al permitir cambiar la forma de elección de sus dirigentes, entregando la decisión exclusiva a la militancia.
Entre la disputa por alcanzar la gloria del cargo panista, el gobierno de la república ha terciado con arremetidas en contra de funcionarios de la pasada administración federal, generando la impresión de que la corrupción fue la premisa durante el sexenio de Calderón. Esto provoca comezón y cólicos a los corderistas que ven en esta intromisión gubernamental, el propósito de equilibrar los cartones con los maderos, no de San Juan que piden pan y les dan palo.
Allende la disputa, no se asoma ni por casualidad la caballerosidad de las contiendas internas de antaño. Invocan, sí, a los fundadores, pero no evocan sus ejemplos. En cambio, exhiben cuan profunda es la fractura dentro de Acción Nacional, porque los dos bandos visibles centran la arquitectura de su interés en crear una imagen negra del contrario, para que a los sentidos del militante y la opinión pública, parezca un corrupto.
Yo no veo después de la renovación o re-elección del 18 mayo a un PAN victorioso y satisfecho de su contienda, por el contrario, y lo digo con pesar, habrá evidentemente un triunfador de la disputa, pero de ninguna manera veo a un conciliador con el peso moral que convoque a la unidad y rectifique el rumbo del partido. En todo caso y para desgracia de la democracia, podría resultar ganadora la estrategia peñista que ofertará a la opinión pública una oposición dividida, desacreditada y no confiable.
P.D. Confirmado, las fórmulas internas que buscan las dirigencias nacionales del PRD y PAN, y la estatal del PAN en Chihuahua, consideraron a ninguna mujer para dichos cargos. Esto avala mi tesis de que la casta divina de la partidocracia mexicana se acuerda de las mujeres solo para los cargos de elección popular, porque es ahí donde aplaca su conciencia con el pago de cuotas, y para seducirlas, ¿verdad Mario?
*Manuel Narváez Narváez. Jarocho de nacimiento en el 65, y chihuahuense por adopción desde el 82. Ex alumno de la FCA de la UACH. Ex -Diputado Federal y Local por Chih., ex Delegado de la Reforma Agraria. Múltiples cursos de Marketing Político y de Seguridad Nacional en USA. Analista Político y editorialista de diversos medios de comunicación desde 1988. Director del periódico digital alcontacto.com.mx ( mnarvaez2008@hotmail.com, Twitter; @manuelnarvaez65)